Debate del Estado de la Comunidad
El Presidente de Aragón destaca los valores del diálogo y el acuerdo para el éxito de su Gobierno
Debate sobre el estado de la Comunidad Autónoma de Aragón
Anuncia que la semana que viene se empezará a negociar el Presupuesto de 2017 con los grupos “porque los aragoneses no pueden esperar”
Repasa las interferencias a su labor de gobierno y apela a la necesaria rehabilitación de la política
El Presidente de Aragón ha subrayado en su discurso en el debate sobre el estado de la Comunidad que su gobierno cumple sus compromisos, tanto con los electores como con los grupos parlamentarios que votaron su investidura (Podemos e IU y a los dos del gobierno), “sin atribuirse capacidades que no tiene”, al tiempo que asegura que su ejecutivo “cree profundamente en Aragón y en sus posibilidades” y por ello actúa en consecuencia.
Tras agradecer a los partidos mencionados su apoyo renovado este mismo mes, ha anunciado que la semana que viene se empezará a negociar el Presupuesto de 2017 con los grupos “porque los aragoneses no pueden esperar”
En su parte de análisis más político de la acción de gobierno, Lambán destaca que el suyo es un gobierno que dialoga y acuerda, que busca asociar a sus propósitos los de la sociedad aragonesa, como vía para ampliar la potencia de sus decisiones, “que compartiendo la idea de Felipe González de que la política debe hacerse cargo del estado de ánimo de los ciudadanos y resolver sus problemas”, ha asumido que “somos ante todo servidores de los aragoneses”.
Es por tanto, un gobierno que recorre el territorio, se reúne con sus habitantes, con los actores sociales y económicos, aprendiendo así a valorar las inmensas posibilidades de la sociedad. De esa manera, conoce en vivo los problemas de los ciudadanos, les pone cara y ojos, ya que “a través de las estadísticas, es imposible abrigar la compasión, en el sentido de compartir el sufrimiento ajeno como requisito previo para empeñarse en remediarlo”, argumenta.
Es, en definitiva, según define el presidente, un gobierno socialista y aragonesista, formado por dos partidos, PSOE y CHA, que, respetando sus diferencias, han sido capaces de establecer un camino ancho y de amplio recorrido orientado sobre cuatro vectores: Fortalecimiento del estado de bienestar; Modernización de la economía aragonesa; Organización del territorio sobre el pilar de los ayuntamientos y Desarrollo de las relaciones entre Aragón y las instituciones del Estado desde una nueva visión.
Rehabilitar la política
El Presidente de Aragón ha abogado por "rehabilitar la política" y hacerlo acreditando "su utilidad para resolver los problemas de los ciudadanos y proponer horizontes de esperanza a los países". Lambán ha instado a dejar de "regodearse en la confrontación y en la división" y "a buscar la cohesión en torno a proyectos comunes".
El jefe del Ejecutivo ha señalado la corrupción y "los comportamientos y actitudes reprobables" junto al ensimismamiento de la política como los principales motivos de la desafección ciudadana. Y por eso, ha reclamado ejemplaridad máxima en el ámbito público y privado y mayores exigencias en las responsabilidades políticas y ha destacado la Ley de Integridad y Ética Pública, que ya se encuentra en tramitación en las Cortes, y el desarrollo "con mucho esfuerzo" de la Ley de Transparencia como instrumentos para combatir la desafección ciudadana hacia la política.
Interferencias en la acción de gobierno
Javier Lambán ha indicado también "las interferencias" a las que -a su juicio- ha tenido que hacer frente el gobierno PSOE-CHA. Por un lado, "el estado de campaña electoral permanente" que ha afectado y "contaminado la política autonómica". "Nunca hemos estado lo suficientemente lejos de unas elecciones como para acordar sin presiones, para actuar mirando por encima del interés partidario, sin mezclar la política nacional con la autonómica y sin confundir los escenarios de una y otra, que son distintos y obedecen a aritméticas y razones distintas", ha argumentado.
Por otro lado, ha aludido a la falta de gobierno, que ha supuesto la paralización de las relaciones bilaterales y de interlocución, "en perjuicio de la urgencia de abordar asuntos como el del carbón, la reapertura del Canfranc, las inversiones estratégicas y, sobre todo, la financiación".
Y en tercer lugar, ha denunciado el problema de la financiación autonómica. "Estamos intervenidos, a merced del Ministerio de Hacienda", ha afirmado. Ha cuantificado en más de 600 millones el dinero que Aragón necesita para hacer frente a sus competencias y ha reiterado la necesidad de reformar el sistema de financiación autonómica. "Queremos debatir en estas Cortes una propuesta para intervenir con voz propia en ese debate nacional, que es cada día más urgente", ha aseverado Lambán, que ha advertido que si no, las comunidades no podrían prestar los servicios y se verán abocadas a la inviabilidad.
Pese estas "interferencias", Lambán ha defendido el cumplimiento de los compromisos. "Hablamos de combatir la pobreza y recuperar los derechos y los servicios públicos como prioridad absoluta, y abordar a continuación la modernización de la economía", ha recalcado.
El Presidente de Aragón ha defendido, al final de su intervención, "un aragonesismo constituido de las potencialidades actuales, sin dejar de lado la historia" y ha apostado por asociar el talento aragonés al diseño e impulso de las políticas públicas.
Intermunicipalidad
También ha incluido Lambán en su discurso un capítulo dedicado a la intermunicipalidad, defendiendo el papel de los ayuntamientos. Por ello, este Gobierno ha hecho un verdadero esfuerzo para que, a pesar de las carencias, se haya aumentado el Fondo incondicionado pasando de 9.6 millones a 15, 9 millones en 2016.
Para hacer frente al debate de la intermunicipalidad , ha apostado por tramitarlo de manera semejante a la tramitación de la ley de capitalidad, en la que el Ayuntamiento de Zaragoza negocia directamente el proyecto que el Gobierno traerá a las Cortes, creemos que ha de ser la FAMPC, como representante de todos ellos, la que haga la propuesta que, debatida con el Gobierno, acabe viniendo al Parlamento. La Ley de capitalidad, por su parte, cuenta con una negociación muy avanzada y el Gobierno desea fervientemente concluirla cuanto antes
Aragón en España
Finalmente, el cuarto vector se ha orientado desde una Nueva visión de las relaciones entre Aragón y las instituciones del Estado.
“Ha llegado el momento de que hacer España desde Aragón, en vez de aceptar que Aragón se haga desde Madrid. Es hora de sentirnos factor de cohesión de la España situada al norte del Ebro. Es hora de superar el viejo esquema de la España radial centralista, heredada del siglo XVIII con centro en Madrid y apostar por una España en red, donde el desarrollo económico no lo determine el poder político del centro”, ha dicho para defender que se desarrolle a fondo el estatuto de autonomía y la bilateralidad de él emanada.
Ha pedido actualizar mediante Ley, nuestros derechos históricos, la fórmula para explorar al máximo las potencialidades de autogobierno de Aragón y de este modo poder afirmar y proteger la identidad aragonesa. Además, suscribir con la Administración General del Estado un acuerdo económico-financiero sustitutivo o complementario al sistema común de financiación en los términos establecidos en el artículo 108 del Estatuto “que nos compense por la deuda histórica que arrastra Aragón en los últimos 30 años”.
También aboga por normalizar el funcionamiento de la Comisión Bilateral Aragón-Estado exigiendo su convocatoria, el cumplimiento de todos y cada uno de los acuerdos tomados en sesiones anteriores, y hacer cumplir su función como principal instrumento de cooperación institucional con el Estado.
A su juicio, “ha sido una buena noticia, en este sentido, que el Tribunal Constitucional haya admitido a trámite el recurso del Gobierno de Aragón contra los PGE de 2016 por haberlos aprobado sin respetar lo establecido en nuestro Estatuto”.