La violencia de género, en cómic

“Se trata de una publicación, un material que será de uso habitual para los profesionales que trabajan con las víctimas de la violencia de género. Identifica los diferentes momentos por los que atraviesan quienes entran en el ciclo de la violencia de género. Hay que tener en cuenta que desde 2003 se ha alcanzado la cifra de 286 huérfanos por este tipo de violencia, una cifra escandalosa que nos lleva a redoblar los esfuerzos para la prevención y erradicación de este tipo de violencia”, indicó la directora del Instituto Aragonés de la Mujer (IAM), María Goikoetxea, en la presentación esta mañana del cómic “Quiero vivir sin violencia” del que son autores Vanesa Bielsa (textos) y Josema Carrasco (ilustraciones).

De la publicación se han tirado inicialmente 200 ejemplares que se van a distribuir, en su mayoría, por los centros de atención a menores y por los colegios profesionales que están en contacto con este tipo de situaciones además de los centros comarcales. La idea es dar continuar a la colección con dos nuevas publicaciones relacionadas con la educación en igualdad y una guía de actuación para las víctimas de la violencia de género.

El cómic forma parte de las actividades programadas con motivo del Día de la Mujer Trabajadora que se celebrará el próximo 8 de marzo.

Según indicó Vanesa Bielsa, autora de los textos, “la historia de “Quiero vivir sin violencia” está basada en los relatos y vivencias de los hijos e hijas de mujeres víctimas de violencia de género. Nace con el objetivo de dar visibilidad a los menores  que viven en sus hogares con este tipo de violencia. Busca transmitir la importancia de las experiencias emocionales durante la separación de sus progenitores y tras la salida del agresor del núcleo familiar y muestra que, en la mayoría de los casos, la violencia no termina tras esta separación sino que se transforma, ya que a través de ellos se sigue ejerciendo con el objetivo de seguir dañando a la madre”

En el prólogo del cómic Vanesa Bielsa explica que “dentro de la amplia diversidad de situaciones que se pueden generar hemos querido hacer mención especial de esos niños y niñas que abandonan todo su entorno, hogar, amigos y amigas, el colegio y la familia para alojarse en una casa de acogida, por ser los más afectados en el sentido de sufrir unos cambios más bruscos”.

Termina diciendo la autora de los textos que “esta publicación pretende ser una herramienta de utilidad para aquellos profesionales que trabajan en el ámbito de la violencia de género y con menores de edad, ya que a las niñas y niños que viven este tipo de situaciones en su hogar, les cuesta mucho expresar las vivencias y las emociones”.