Una unidad móvil recorrerá los hospitales públicos aragoneses para realizar resonancias magnéticas
Llevará a cabo 7.500 pruebas de este tipo al año, evitando desplazamientos de los ciudadanos y reduciendo el tiempo de espera actual
Una unidad móvil de resonancias magnéticas recorrerá los distintos hospitales públicos aragoneses para realizara este tipo de pruebas y evitar así los desplazamientos de los ciudadanos, que hasta ahora eran derivados a otros centros, además se reduce el tiempo de espera y se facilita que los hospitales puedan disponer de una tecnología de la que carecían.
El vehículo que ha sido presentado esta mañana por el consejero de Salud y Consumo del Gobierno de Aragón, Alberto Larraz, y por el gerente del Servicio Aragonés de Salud, Alfonso Vicente, supone un avance importante en la prestación de servicios a los ciudadanos. Su puesta en marcha responde al crecimiento de la demanda de resonancias y a la necesidad de acercar la tecnología a los hospitales. Con esta iniciativa se evitará que 2.000 ciudadanos de Teruel tengan que desplazarse hasta Valencia, que 1.500 que son atendidos en el Hospital de Barbastro tengan que ir a Huesca o que 750 de Alcañiz y otros tantos de Calatayud vengan a Zaragoza. Asimismo, se reduce de manera importante el tiempo de espera, que será de menos de 30 días.
Con esta unidad móvil se realizarán 7.500 pruebas al año y está previsto que de aquí a finales de este año se lleven a cabo 2.520. Semanalmente se dirigirá a los distintos centros hospitalarios, la previsión inicial es que al Hospital de Alcañiz y al Ernest Lluch de Calatayud se desplace dos veces al mes; entre cuatro y seis veces al mes al Obispo Polanco de Teruel, las mismas que en el Hospital de Barbastro, en el San Jorge de Huesca y en el Royo Villanova. Además, está previsto que de manera puntual, en función de las necesidades, pueda apoyar al Hospital Clínico y al Miguel Servet que disponen de esta tecnología y que seguirán atendiendo las solicitudes urgentes tal y como lo han venido haciendo hasta ahora. Para la puesta en marcha de este programa, de carácter trianual, el Departamento de Salud ha realizado una inversión de 3.168.000 euros.
La resonancia magnética se ha convertido en una prueba cada vez más demandada por los especialistas médicos, sobre todo en aquellas especialidades que necesitan un diagnóstico preciso de localización, ya que es una técnica que consigue una imagen de alta calidad.