El Gobierno de Aragón destinó 1,5 millones de euros en 2019 a financiar proyectos relacionados con el agua en países en desarrollo

El Gobierno de Aragón aportó durante el año pasado 1,5 millones de euros a doce proyectos vinculados al suministro y potabilización del agua en países de África, Latinoamérica y Oriente Medio y todos tenían en común el mejor aprovechamiento de los recursos hídricos y el fomento de la agricultura local mediante técnicas agroecológicas sostenibles. Esta financiación se llevó a cabo a través de la Dirección General de Cooperación al Desarrollo e Inmigración, dependiente del Departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales. La directora general de esta área, Natalia Salvo, asegura –con motivo de la celebración hoy, 22 de marzo, del Día Mundial del Agua, que “el acceso a este recurso constituye una medida prioritaria de la cooperación aragonesa para el desarrollo, ya que entendemos que se trata de un derecho humano de todas las personas y de una necesidad básica para la vida”. Por eso, es un elemento central de la acción política, “porque somos conscientes de su importancia, ya que en torno al Ebro se ha articulado buena parte de los somos los aragoneses y aragonesas”.   Las once entidades que recibieron subvenciones del Gobierno de Aragón en el compromiso por mejorar la situación de las poblaciones de los países más vulnerables son la Fundación Ecología y Desarrollo; la Fundación Entreculturas-Fe y Alegría; la Fundación Familias Unidas; Médicos del Mundo; Acción Solidaria Aragonesa; ARAPAZ-MPDL Aragón; Cáritas Autonómica de Aragón; Farmacéuticos Mundi; la Fundación Alianza por los Derechos, la Igualdad y la Solidaridad Internacional; la Fundación Más Vida y la Fundación Vicente Ferrer. Con estos fondos, estas organizaciones pudieron llevar a cabo sus proyectos de reabastecimiento de zonas deprimidas, fomentar la economía local, impulsar la participación ciudadana y empoderamiento femenino y difundir educación en hábitos sanos y saludables.   En concreto, el proyecto desarrollado por Médicos del Mundo en seis municipios de La Paz, Bolivia permitió dar pasos, no solo en potabilización y saneamiento del agua, sino en la calidad de las viviendas, carreteras y otras infraestructuras. También se reforzaron las competencias del personal sanitario, lo que repercutió en un fortalecimiento del sistema público de salud y se promovió el ejercicio del derecho a la asistencia sanitaria entre los grupos vulnerables.   En Chad, la Fundación Entreculturas-Fe y Alegría proporcionó materiales didácticos en 38 escuelas rurales e instó a mantener hábitos higiénicos entre los más pequeños colocando un pozo y dos módulos de letrinas en tres centros. En Senegal, ARAPAZ-MPDL Aragón se centró en alfabetizar a las mujeres de tres comunidades al suroeste del país para que se apropiaran de los proyectos de producción ecológica y comercialización en la región.   Cáritas Aragón desarrolló la agricultura local en Palestina, potenciando la utilización de recursos propios y colocando sistemas de bombeo eléctrico del agua a partir de energía renovable. Lo mismo hizo Fundación Ecología y Desarrollo en Nicaragua con placas fotovoltaicas y un mini acueducto para llevar el agua a 3.406 habitantes del departamento de León.   Farmacéuticos Mundi optó por la capacitación de los pueblos indígenas de Ecuador y la recuperación del policultivo, y la Fundación Alianza por los Derechos, la Igualdad y la Solidaridad Internacional facilitó el acceso a tecnología agraria en Senegal para aumentar la calidad del producto fresco. Fundación Más Vida en Nicaragua abasteció de agua potable a 60 familias productoras de Santa Rosa y Familias Unidas, a 557 familias en Estelí. Acción Solidaria Aragonesa trabajó con colectivos de mujeres, jóvenes y otros actores en la participación en políticas públicas en El Salvador y promocionó los proyectos de emprendimiento personal en Quibdó, Colombia. Por último, la Fundación Vicente Ferrer permitió el acceso a nuevos recursos e insumos agrícolas para 347 familias de varias aldeas en la India.   El agua en el mundo   Según datos de la ONU, 2,1 billones de personas en el mundo no tienen acceso al agua potable y hasta 4,5 billones no disponen de sistemas para sanearla. Esto afecta fundamentalmente a países con escasos ingresos, donde unas 842.000 personas mueren al año como consecuencia de la insalubridad del agua y una higiene deficientes. Las enfermedades diarreicas son, de hecho, una de las principales causas de muerte entre los niños menores de 5 años y el agua está estrechamente vinculada a la prevención de la mortalidad infantil.   El agua es y será parte crucial de la adaptación al cambio climático y su gestión eficiente es clave para garantizar la disponibilidad de este elemento en el futuro. Naciones Unidas calcula que 4 de cada 10 personas en el planeta sufren escasez de agua a día de hoy y las migraciones climáticas se han convertido ya en una de las primeras causas de desplazamiento forzado de personas.   Plan Director de la Cooperación aragonesa para el Desarrollo (2020-2023)   El agua figura como objetivo sectorial prioritario dentro del Plan Director de la Cooperación aragonesa para el Desarrollo redactado por el Gobierno de Aragón para el periodo 2020-2023. De esta forma, se da cumplimiento a los Objetivos de Desarrollo Sostenible 1, fin de la pobreza; 2, hambre 0; 3, vida saludable; 6, gestión sostenible del agua; 10, fin de las desigualdades, y 13, acción por el clima.

En Aragón, el agua tiene además un componente identitario y está intrínsecamente ligada al desarrollo de la Comunidad de manera nuclear. Es eje vertebrador de la historia y el territorio aragonés.

* Se adjunta audio de Natalia Salvo