Susín certifica en Tarazona el impacto positivo de las unidades de convivencia: “Es un modelo de presente y futuro para Aragón”

La consejera de Bienestar Social y Familia, Carmen Susín, se ha desplazado este martes a Tarazona, donde ha visitado las dos unidades de convivencia con las que cuenta el Hogar Doz, dependiente del Instituto Aragonés de Servicios Sociales. Estas dos unidades cuentan con 23 plazas que se basan en un modelo de atención que prioriza la autonomía de cada usuario y recrea un entorno asemejado a un hogar en el que se evita aplicar protocolos que cosifiquen o despersonalicen a los mayores y dependientes. 

"Éste es el cambio físico que permite ese cambio en el modelo de cuidado", ha asegurado la Consejera respecto a la puesta en marcha de estos espacios: "El esfuerzo se ha hecho no sólo en estas unidades de convivencia en residencias del IASS por toda la comunidad Autónoma, sino también en la formación de 900 profesionales" que en su labor del día a día hacen real "un cambio de mentalidad".

Acompañada por el gerente del IASS, Ángel Val; por la 1ª teniente de alcalde de Tarazona, Ana Cristina Sainz; la concejala delegada de Bienestar Social y Servicios Sociales del Ayuntamiento, Lourdes Sánchez, y la directora del Hogar Doz, Cristina Sola, Susín ha conocido el funcionamiento de estas dos unidades de convivencia del centro, situadas en la planta 4ª, y ha mantenido un encuentro con los usuarios que conviven en estos espacios.

“El modelo de atención centrada en la persona se ha demostrado como el más eficaz a la hora de satisfacer las necesidades y demandas de las personas que viven en un centro residencial”, remarcaba la Consejera, que ha recordado que el IASS empezó a impulsar este paradigma en 2018 basado en promover “el buen trato, el fomento de la autonomía y la participación e implicación de los usuarios y sus familias”.

En Hogar Doz se han invertido un millón de euros para crear y equipar las dos unidades de convivencia, con capacidad para 23 usuarios (en la actualidad están ocupadas 9 plazas en una unidad y 13 en la otra) que se suman a las 69 plazas ordinarias de las que dispone el centro; en total, 92. Además del acondicionamiento de las unidades de convivencia, también se ha llevado a cabo una mejora general de las instalaciones y del sistema de prevención de incendios y se ha instalado un nuevo sistema de comunicación y alarmas.

Las unidades de convivencia son espacios en los que conviven varias personas mayores en situación de dependencia y a los que se les proporcionan los apoyos necesarios para que puedan desarrollar su vida cotidiana en un contexto hogareño. En estas unidades suelen vivir entre 10 y 15 personas con características y capacidades diversas con el apoyo de varios cuidadores con la menor rotación posible. 

Las unidades incluyen espacios comunes –cocina, comedor, sala de estar– y privados –en su mayoría habitaciones individuales y algunas dobles, en caso de parejas– que se acomodan a la historia de vida, la intimidad y las relaciones con amigos y familiares de cada usuario.

Un modelo de presente y futuro

Además del acondicionamiento de los centros residenciales, el IASS está llevando a cabo una transformación de la organización y metodología de trabajo en colaboración con el Instituto Matia, referente nacional en la materia, que da apoyo en el proceso de implantación del modelo, en la formación al personal y en la evaluación del impacto de la puesta en marcha de este modelo de atención en cada residencia.

En total, se ha dedicado a la formación del personal 1,2 millones de euros: 900 trabajadores de centros del IASS cuentan ya con formación básica y aquéllos que trabajan de forma directa en las unidades –más de 200 profesionales– están recibiendo formación y asesoramiento con mayor intensidad. En el caso del Hogar Doz, 90 trabajadores de un total de 110 han llevado a cabo esta capacitación.

Todos los centros en los que se implantan estas unidades realizan un proceso de entrevistas con todos los agentes implicados –trabajadores, personas usuarias y familias– en los que se revisa y analiza cada caso concreto para adaptar en lo posible cada unidad de convivencia a las capacidades, necesidades y preferencias de las personas que la integran.

De aquí a 2025 entrarán en funcionamiento hasta 20 unidades de convivencia en nueve centros de gestión directa del IASS en todo Aragón con una inversión de 12,5 millones de euros procedentes de fondos europeos. A finales de 2023 habían concluido las obras de ocho unidades en cinco residencias y varias de ellas están plenamente operativas, como las de Hogar Doz en Tarazona, las de Romareda en Zaragoza y las de la residencia Ciudad de Huesca, que acaban de empezar a funcionar.

También cuentan con sus respectivas unidades de convivencia en el Centro Asistencial de Calatayud y en Albarracín. Quedan pendientes de ejecución 12 unidades en cuatro centros: en Utrillas se encuentran en ejecución; las de la Sagrada Familia en Huesca y la de Javalambre están ya en proceso de licitación, y en Borja se acaba de iniciar la licitación.

El Gobierno de Aragón y en concreto el Instituto Aragonés de Servicios Sociales sigue abundando en la implantación de proyectos y forma de hacer que tengan como referencia la atención centrada en la persona. De este modo se está trabajando ya en un protocolo para sensibilizar sobre el buen trato a las personas mayores que será de obligado cumplimiento en el IASS y que sirva de referencia al resto de residencias de Aragón.

También se está recibiendo asesorías y apoyos para disminuir las sujeciones físicas y químicas y obtener las correspondientes certificaciones como espacios libres de ese tipo de contenciones. Además, en colaboración con el Departamento de Sanidad, se están planteando alternativas para disminuir la polifarmacia en las residencias. 

Estas acciones se complementan, entre otras, con los programas de actividades de envejecimiento activo y la mejora de la calidad de vida de las personas usuarias y la extensión paulatina de los programas de Promoción de la Autonomía Personal (PAP) a centros de gestión directa del IASS y también a otros concertados y privados.

Diversidad e inclusión laboral en Tarazona

 Tras conocer las unidades de convivencia del Hogar Doz, la consejera Carmen Susín ha visitado el centro ocupacional de la comarca de Tarazona y el Moncayo, donde una veintena de personas con diferentes tipos de discapacidad física o psíquica, desarrollan actividades ocupacionales, lúdicas, formativas y pre-laborales, con el fin de incrementar su bienestar, integración y participación social.

La Consejera ha mantenido al final de la mañana un encuentro con el alcalde de Tarazona, Tono Jaray, y más tarde ha podido conocer de primera mano el trabajo de la Asociación de personas con diversidad funcional Pierres en su sede, que tienen previsto ampliar próximamente.