Medio Ambiente
El Gobierno de Aragón ha invertido más 12M€ en la mejora de la depuración de las aguas residuales de la provincia de Teruel
Joaquín Olona ha anunciado en su visita a las EDAR de Mas de las Matas y Castelserás una nueva convocatoria de subvenciones, por valor de 2,5M€, que el Instituto Aragonés del Agua publicará en el BOA en los próximos días.
En 2023, todos los municipios turolenses de más de 1.000 habitantes cumplirán con la obligación de depurar sus aguas residuales.
Desde el 2016, la inversión en depuración en la provincia de Teruel supera los 12 millones de euros y, en los próximos días, el Instituto Aragonés del Agua (IAA) publicará una nueva convocatoria de subvenciones por valor de 2,5M€ con el objetivo de completar las necesidades de depuración de los pequeños núcleos de población turolenses. Así lo ha anunciado el consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, Joaquín Olona, durante la visita de este jueves a las Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales (EDAR) de Mas de las Matas y Castelserás, en el Bajo Aragón.
Olona_Gracias al FITE, en 2023, todos los municipios de más de 1.000 habitantes cumplirán con la obligación de depurar sus aguas residuales
Olona_Desde el 2016 hemos invertido 12 millones de euros para la depuración en Teruel
Actualmente ambas instalaciones están gestionadas de forma independiente por el IAA, aunque a partir del próximo mes de octubre se explotarán de manera conjunta a través de un único contrato de servicios. “A medida que se van construyendo estaciones de depuración y los municipios van encomendando su gestión al Instituto Aragonés del Agua se van licitando contratos de servicios de mantenimiento por zonas territorializadas aprovechando sinergias, como en este caso”, ha explicado el consejero de Agricultura durante su visita al Bajo Aragón. Las dos instalaciones han sido financiadas por el Fondo de Inversiones de Teruel (FITE) y representan dos tipos muy distintos de tecnología en depuración: la tradicional y la conocida como “filtro verde”.
En la provincia de Teruel están ejecutadas y en funcionamiento todas las depuradoras de más de 2.000 habitantes equivalentes (h.e.), y prácticamente se ha llegado también al límite de los 1.000 h.e. Las estaciones de Castellote, Mazaleón, Mas de la Matas y Calaceite, han sido financiadas en parte con fondos del FITE 2018 y 2019 y su explotación está siendo gestionada ya por el Instituto Aragonés del Agua.
Como proyecto del FITE 2020 se encuentra en estos momentos en construcción la depuradora de Cantavieja, de 1.000 h.e. La de Aguaviva (de 1.375 h.e.) saldrá a licitación este mes de marzo y se financiará con el FITE 2021. “En toda la provincia, únicamente quedan dos actuaciones pendientes de más de mil habitantes equivalentes, que son las de La Iglesuela del Cid y Valdealgorfa, para las que la previsión es ejecutarlas directamente con fondos FITE 2022 y 2023 respectivamente”, ha puntualizado Olona.
Por debajo de este umbral de 1.000, el Instituto Aragonés del Agua tramitó en los años 2017 y 2018 sendas convocatorias de subvenciones para ir avanzando en la depuración del resto de núcleos de Aragón. Se concedieron subvenciones para la construcción de depuradoras y/o colectores en diez municipios en la provincia de Teruel: Alacón, Griegos, Villar del Cobo, Cuevas Labradas, Valdecuenca, Olba, Peñarroyas (en Montalbán), Torrecilla de Alcañiz y tres actuaciones en colectores generales en Albalate del Arzobispo, Cella y Villastar. Todas las depuradoras y colectores están ya en marcha.
El año pasado se publicó una convocatoria de subvenciones con cargo al FITE 2020, dirigida a entidades locales para impulsar actuaciones relativas a la redacción de proyectos de mejora de la depuración de aguas residuales. En total se recibieron 58 solicitudes, cuyo importe conjunto de subvención solicitado ascendió a 1,1M€ y se concedió subvención a 11 actuaciones: Andorra, Teruel (EDAR San Blas y EDAR Caudé), La Portelada, Fuendespalda, Linares de Mora, La Codoñera, Fuentesclaras, Lledó, Albentosa y Valdeltormo.
El Instituto Aragonés del Agua publicará una nueva convocatoria, dotada con 2,5M€, que permitirá al Gobierno de Aragón seguir completando las necesidades de depuración en los núcleos urbanos de menos de 1.000 habitantes equivalentes en la provincia de Teruel
Este año, el Gobierno de Aragón pretende continuar con el programa de inversiones en depuración de aguas residuales en la provincia de Teruel, “por considerar esencial la prestación de este servicio y dado el interés demostrado por los municipios turolenses en resolver la depuración de sus aguas residuales”, ha apuntado el consejero. Por ello, se ha incorporado al FITE 2021 una partida de 2,5M€ de euros, para sacar una convocatoria de subvenciones a las entidades locales para la mejora de depuración de aguas residuales en núcleos urbanos de menos de 1000 habitantes equivalente de la provincia de Teruel.
La convocatoria se hará pública en el Boletín Oficial de Aragón (BOA) en los próximos días y tendrá dos líneas:
Como novedad, como novedad y en aras de reducir la burocracia, las solicitudes se tramitarán a través de un tramitador electrónico y los municipios que se presentaron el año anterior sin resultar beneficiarios, tan solo deberán presentar nuevamente su solicitud si lo desean para la línea 1, sin que sea necesario volver a remitir la documentación que ya obra en poder del IAA.
Para la línea 2, podrán ser beneficiarios las entidades locales que presenten un proyecto aprobado de mejora de la depuración o bien sean beneficiarios de la convocatoria aprobada por la Orden AGM/171/2021, de 3 de marzo, con cargo al Fondo de Inversiones de Teruel 2020 dirigida a entidades locales para impulsar actuaciones relativas a la redacción de proyectos de mejora de la depuración de aguas residuales en la provincia de Teruel (Convocatoria FITE publicada en 2021).
Desde el IAA se prestará apoyo técnico y acompañamiento durante todo el proceso, para elegir la solución más eficiente tanto desde el punto de vista técnico, como económico y para asegurar la viabilidad de los proyectos, dado que todos ellos deben ser autorizados por el correspondiente Organismo de cuenca.
La EDAR de Mas de las Matas, un sistema de depuración tradicional, en funcionamiento desde 2020
La EDAR de Mas de las Matas trabaja con un sistema de depuración tradicional. Las aguas residuales procedentes de la localidad llegan a la depuradora a través de un colector general, siendo recogidas en un pozo de bombeo de agua bruta. De aquí las aguas son elevadas al pretratamiento, con un sistema de recogida de residuos. Las aguas pretratadas entran a un tanque, donde posteriormente son bombeadas al lecho bacteriano, equipado con un distribuidor motorizado. Las aguas de salida pueden ser bombeadas de nuevo al lecho (en todo o en parte) o pasan al sistema de decantación secundaria de donde el agua ya depurada es vertida a cauce.
Los fangos resultantes del proceso de decantación secundaria son enviados al tanque, de donde posteriormente son extraídos y conducidos hasta un depósito de regulación, previo a su impulsión al sistema de deshidratación mediante un decantador centrífugo con el que cuenta la EDAR. Los fangos deshidratados son bombeados hasta la tolva de almacenamiento de donde son retirados para su posterior valorización en el sector agrario.
La obra de esta instalación se inició en enero de 2019 y finalizó en julio de 2020. El coste total de la inversión ha sido de 1.430.325€ y fue diseñada para tratar una carga contaminante equivalente a 1733 habitantes y 650 m3/d. La carga contaminante tratada en 2021 ha sido de 1511 hab-eq y el caudal medio tratado de 263 m3/d.
La EDAR de Casteserás, una instalación piloto del Gobierno de Aragón, que responde al modelo del llamado “filtro verde”
La EDAR de Castelserás responde al modelo conocido como “filtro verde” y se empezó a construir en 2017 como un proyecto piloto por parte del Gobierno de Aragón. El consejero ha recordado su visita en verano del 2018, cuando las obras estaban a punto de concluir, y ha vuelto a poner de manifiesto que esta instalación es, “sin duda, una apuesta ambiental por la innovación y por métodos de depuración más sostenibles y adaptados a las necesidades de municipios de menos de 2000 habitantes”.
El sistema de tratamiento “de filtro verde” que utiliza es un humedal artificial mediante un filtro de gravas de flujo vertical, con plantaciones de juncos. El agua residual atraviesa el filtro de arriba abajo y en el material filtrante se produce la oxidación de la materia orgánica. Las raíces de las plantas crean una tupida red que “cose” el material del filtro e impide que el agua abra caminos preferenciales en el filtro. El agua depurada se recoge en la parte inferior del filtro mediante una serie de tuberías drenantes.
Este sistema tiene un consumo mínimo de energía, aunque por el contrario necesita una gran superficie en comparación con las tecnologías convencionales. Su mantenimiento es barato y sencillo, pero no hay que olvidar que pasados unos 7-10 años, es necesario retirar el fango acumulado en la parte superior del filtro y reponer la capa más superficial del mismo.
Según han explicado desde el Instituto Aragonés del Agua, se trata de un sistema óptimo para pequeñas poblaciones (por debajo de 1.500 h.e.), que dispongan de terrenos más o menos llanos con superficie suficiente. Sin embargo, no se recomienda su uso donde haya una alta exigencia de eliminación de nutrientes, principalmente compuestos nitrogenados, porque este sistema no puede eliminar el nitrógeno en la medida que exige la directiva para las zonas sensibles. Salvando este inconveniente, los rendimientos en el resto de parámetros habituales de medida de la contaminación es muy elevado.
Este tipo de plantas requiere que su puesta en funcionamiento inicial se extienda al menos un par de años, dado que hay que respetar el ciclo vegetativo de las plantas.
En concreto, la planta de Castelserás fue diseñada para una carga contaminante equivalente a 1.650 habitantes y un caudal de 240 m3/d. En 2021, la carga contaminante tratada ha sido de 1317 habitantes equivalentes y el caudal medio de 120 m3/d.
En la actualidad, la explotación de esta EDAR se realiza de manera conjunta con Torrecilla de Alcañiz por medio de un contrato de servicios que comenzó el 15 de diciembre de 2020, estando prevista su explotación conjunta con varias depuradoras del Bajo Aragón (Alcañiz y otras) a partir de octubre de este año.
Desde 2018 también se han ido construyendo otras depuradoras extensivas en otras localidades de la provincia como Torrecilla de Alcañiz o Jaulín y son varios los núcleos pirenaicos que están construyendo sus estaciones depuradoras con estas tecnologías “verdes”. Asimismo, la futura planta de Aguaviva seguirá este modelo.