El Departamento de Medio Ambiente continúa la ronda de reuniones para explicar las medidas de protección de Mequinenza y su entorno
El director general de Medio Natural, Alberto Contreras, mantendrá encuentros con sindicatos, organizaciones profesionales agrarias, confederaciones de empresarios y asociaciones ecologistas.
El director general de Medio Natural, Alberto Contreras, y técnicos del Departamento de Medio Ambiente, van a mantener esta semana varias reuniones de trabajo con diversos agentes sociales, con el fin de explicarles las medidas de protección ambiental previstas para los embalses de Mequinenza y Ribarroja y su entorno.
Las reuniones, que comienzan mañana martes en el Edificio Pignatelli del Gobierno de Aragón, incluirán a las centrales sindicales, organizaciones profesionales agrarias, confederaciones de empresarios y asociaciones ecologistas. El pasado martes día 9, el consejero de Medio Ambiente, Alfredo Boné, ya mantuvo en Mequinenza un primer encuentro con los doce alcaldes y cuatro presidentes comarcales en cuyos municipios están previstas las medidas de protección.
El Gobierno de Aragón, reunido en Consejo Extraordinario el 28 de noviembre, aprobó una serie de medidas para proteger la valiosa riqueza medioambiental de los embalses de Mequinenza, Ribarroja y su entorno, mediante la declaración de la Reserva Natural del Aiguabarreix, el Paisaje Protegido del Mar de Aragón y el inicio del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales de la "zona oriental de Monegros Sur".
El río Ebro conforma, en su tramo final de Aragón, un corredor que conjuga los valores ecológicos únicos de Los Monegros y las sierras abruptas que lo enmarcan al atravesar el Bajo Aragón Zaragozano y el Bajo Cinca, así como el característico sistema limnológico del río. La riqueza de este territorio se manifiesta en las más de 4.500 especies de flora y fauna descritas en Monegros, muchas de ellas endémicas, o los hábitats de vegetación forestal de las laderas y barrancos que desembocan en el embalse, en las sierras de los Rincones o Serreta Negra, y el interés de muchas especies de fauna acuática que alberga el propio río.
El Gobierno de Aragón considera que el proyectado trasvase del Ebro supone una grave amenaza para estos parajes, por lo que, en conformidad con lo establecido en la Ley de Espacios Naturales Protegidos de Aragón, está decidido a tomar cuantas medidas sean precisas para garantizar su conservación.